Cuando se muere en brazos de la Patria agradecida... empieza en con el morir la vida

Sin importar la distancia, ni el tiempo que dejaron de caminar de nuestras manos, sin hablar de ellos en pasado y contando sus historias como recuerdos que hoy acompañan a cada uno de los que luchan por un mundo mejor, los participantes en la III Asamblea Continental de ALBA Movimientos recordaron a los que ya no se encuentran físicamente entre nosotros, pero han estado en cada uno de los espacios desarrollados.

Fernando Martínez Heredia, nuestro Fernando, el padre que aún nos guía en la lucha contra el imperialismo y nos recuerda que la Revolución es el arte de imaginar más allá de lo posible.

Carlitos, el compa que continúa honrando la vida, defendiendo la causa de los humildes del Perú, impulsando cada una de las batallas que inició con la fuerza de todo un continente.   
 
Juaquin Piñeiro, hermano, amigo entrañable que nos recuerda las palabras martianas que cuando se muere en brazos de la patria agradecida, …., la prisión se rompe, empieza al fin con el morir la vida.
 
Y Berta Cáceres, quien por su lucha incansable fue sembrada en la historia pero no pudieron impedir que renaciera en cada uno de los que hoy continúan luchando por un mundo mejor.  
 
No faltaron los poemas, las canciones, las anécdotas y lágrimas de los amigos, hermanos de lucha y de los que, como esta cronista, se incorporaron por primera vez a esta causa que tantas almas grandes nos ha arrebatado, pero que en nuestros corazones están y estarán presente, presente, presente… ahora y siempre.